¿Qué pensarían de las campañas publicitarias si las personas a las que se dirigen tuvieran los conocimientos suficientes para analizarlas y entenderlas? Este ha sido el objetivo de mi "diario publicitario" este año. Y, por ello, en las nueve historias que lo conforman, los personajes reflexionan sobre los anuncios con los que se cruzan y les llama la atención. Un hombre que de camino al trabajo se queda sorprendido por la campaña de Absolut, dos amigas que hablan sobre las modificaciones lingüísticas en los anuncios, una mujer que no ve fácil de decodificar un anuncio, un trabajador de una empresa que ha propuesto jugar con Lego para modificar la comunicación interna...
De ahí, derivó el título de Jueces de la imagen... por casualidad que terminé acuñando para darle el nombre genérico a todas las historias puesto que nueves personas, con sus diferentes visiones, acostumbradas a ser receptores en el proceso de comunicación pueden opinar con fundamento sobre lo que ven y les capta la atención. La incidencia de la publicidad en la sociedad es tal que, ¿por qué no verlo desde la otra parte?
Por último, pensé presentarlo a través de la web en un blog puesto que es el modo más interactivo en el que el público puede opinar abiertamente y modificar su papel de receptor, cambio que no puede producirse en otros contextos de comunicación.
